Una vida organizada tiene infinitos beneficios para la salud mental y física de la persona. No se trata de un simple cambio en nuestra forma de organización empresarial sino también un estilo de vida que ayuda a los espacios que nos rodean. Todo ello, aporta de forma directa una sensación de paz que se traduce en un mejor rendimiento. De hecho, hay estudios que relacionan la limpieza de espacios con un mejor rendimiento académico. Hoy en Senegar Medica hacemos un hueco a la organización como forma de estilo de vida saludable, con algunos de los hábitos más comunes entre la gente organizada.
La gente altamente organizada madruga. La base de un día productivo. Levantarse a una hora temprano garantiza que podrás estar completamente despejado para realizar todas tus tareas y llegar al trabajo con una actitud despejada y productiva. También es recomendable realizar pequeños ejercicios de respiración para afrontar el día más eficientemente durante los primeros momentos del día. Además, madrugar tiene sus ventajas: tomarte más tiempo en el desayuno, realizar las tareas con calma y dejar de lado al estrés.
Evitar distracciones con el móvil en la mañana. ¿Eres de los que nada más levantarte miras el móvil en busca de esos WhatsApp atrasados, los emails sin responder o las actualizaciones en redes sociales? Lamentamos decirte que esto no aumenta tu organización ni tu salud. Pues además de quitarte tiempo, no te deja localizar tus objetivos, provocando una gran pérdida de tiempo.
Desarrollar una actividad que te guste durante un periodo corto de tiempo. Parece algo imposible, pero sin duda una de las ventajas que tiene la organización es dejar un espacio de tiempo lo suficientemente grande para realizar algo que nos guste. ¿El mejor horario? Lo eliges tu: O bien a primera hora nada más desayunar o después de trabajar. Dibujar, escribir, tocar un poquito un instrumento, pintar... dedicarle un poquito de tiempo a un hobbie es sin duda la mejor manera de descargar nuestra mente y aumentar la concentración para lo que viene después.
Organización previa del espacio. Es indispensable que tengas un espacio organizado para trabajar. Bien sea la oficina, bien sea tu hogar. No puedes concentrarte con todos esos papeles desorganizados donde pierdes más tiempo buscando que trabajando. Invierte un día en la organización de tu espacio de trabajo para que nunca más te tengas que preocupar de esas pérdidas innecesarias de tiempo. IMPORTANTE: mantenerlo.
¿Lista de tareas? Depende. Yo en mi caso son increíblemente útiles pero hay quien no lo recomienda por el hecho de que cuando nos paramos a pensar en todo lo que tenemos que hacer y que aún no hemos hecho, la lista se nos amplia hasta en más de 20 tareas que, sinceramente, sabemos que no vamos a realizar. Por ello es muy importante ser claros con nuestros objetivos diarios y sobre todo realistas.
Planificación de descansos. Se le llama también la regla POMODORO. Y dice así, por cada 25 minutos de trabajo, cinco de descanso, después de realizar 4 veces la operación, tomate un descanso de 25 minutos. ¡Pero ojo! Esos minutos de trabajo son EXCLUSIVAMENTE de trabajo. Nada de distracciones, nada de mirar otras cosas ni pensar en nada que no esté íntimamente relacionado con el trabajo que estés realizando.
Hacer primero lo más tedioso. Finalizar el día con lo más fácil y divertido siempre es la mejor opción de cara a tu salud mental.
Cuida la alimentación y tu cuerpo. Además de la paz mental, contar con la paz física es básico para un desarrollo positivo de toda la salud que necesitamos. Es un obligado en todo estilo de vida saludable: cuidarse por dentro a través de una dieta equilibrada y de una buena actividad física. Es indispensable alimentar nuestro cuerpo de forma eficiente para poder rendir todo el día.
